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El Almeal

Hace poco fui al Almeal, un balneario de mi hermosa ciudad, Cuautla. Lo recordaba bonito y así sigue, las albercas igual de frías, y las áreas verdes igual de amplias, las áreas de sombra muy frescas gracias al frondoso follaje de los árboles que en su mayoría son frutales, mangos, aguacates, guayabas, chico y uno que otro limón. 

Fui al Almeal con el grupo Scout de Cuautla, como parte de las actividades scout estaba el levantar la basura ya que uno de los lemas es, "dejar el lugar, mejor de lo que lo encontramos"; llegamos justo a la hora en la que recogían la basura de los botes de basura, todos rebosando de la misma; cada uno de nosotros teníamos que escoger un área de 2 metros cuadrados, aproximadamente, para dejar libre de basura, sin embargo parecía imposible, llegué a ponerme de muy mal humor, con ganas de golpear los botes de basura o a la gente que "hace la basura", en verdad el ver tanta suciedad me puso de muy mal humor.

Limpiaba un área y cuando le daba la espalda para limpiar otra área, mágicamente el área que se supone ya había cubierto, aparecía llena de pequeñas basuritas, deduje que el aire las movía y las traía justo donde yo estaba para ser colocadas en su lugar, el bote de basura. Lo que más encontré fueron popotes, globos rotos, corcholatas y papel celofán. Era tanta la basura que incluso el pasto crecía por encima de los popotes, haciendo que costara más trabajo extraerlos y así fue como me cuestioné, ¿en verdad son tan necesarios?, ¿por qué se usan tanto?; con respecto a los globos, creo que empecé a odiarlos, un globo roto se puede convertir en mil trozos pequeños que pareciera, nunca se desintegran y me dije "¿cómo es que algo que alegra tanto en un momento puede ser la fuente de tanto enojo cuando se convierte en basura?"; en verdad, está probado que el desorden o suciedad provoca distracciones y hasta el enojo. Otro tema que me impactó fueron las corcholatas de cerveza, eran demasiadas y todo el balnearios estaba lleno de ellas, la mayoría eran de una marca, pero eso no es lo relevante, y es que ¿qué ejemplo le estamos dando a los niños?, no dejamos que los niños entren a la alberca comiendo o inmediatamente después de haber comido pero el ejemplo es que puedes embriagarte dentro de la alberca, con el peligro de vomitar dentro de ella y hasta morir (sí me fui muy al extremo, pero es cierto), otro mal ejemplo es: "es normal que en los lugares de recreación y deportivos se consuman drogas (sí, el alcohol es una droga y el alcoholismo una enfermedad mortal)" y entonces es que recuerdo las palabras de mi hermana, "si así tienen un lugar público, imagínate sus casas" y claro la frase que no puede faltar "por eso estamos como estamos".

Acampamos en el Almeal y al amanecer había más basura que la que habíamos levantado por la tarde, en verdad nunca acababa y no dejaba de preguntarme ¿cómo es que generamos tanta basura? y también pensaba en la importancia de reciclar, la importancia de separar la basura y simplemente la importancia de hacernos conscientes del impacto de nuestras acciones ya sea para con la naturaleza y para con nuestros niños. Todos los Cuautlenses sabemos que el agua de este balneario es de manantial, es 100% potable, ahí mismo la ves nacer y aún así nos mostramos indiferentes y groseros arrojando basura a diestra y siniestra.

Mi aprendizaje fue que aunque adoro los globos, de ahora en adelante estarán prohibidos, que efectivamente, lo mejor es decir no al popote y que nunca hay que mezclar paisaje, aire libre, deporte y sana diversión familiar con drogas ya que jamás serán un buen ejemplo y lo más importante, colocar la basura en su lugar. 



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